Productores de diferentes rubros toman medidas para evitar problemas en caso de no cumplirse las previsiones. 

Las perspectivas climáticas indican que este invierno tendrá temperaturas por encima de lo normal, con un menor número de heladas esperadas respecto a otros años, pero de todos modos los productores de los diferentes rubros toman sus precauciones para evitar inconvenientes en la producción.

El Observador Agropecuario consultó a expertos de los diferentes rubros, quienes comentaron cómo impacta el invierno en sus actividades y cómo prepararse para sobrellevar la estación.

Sobre la ganadería vacuna de carne, el ingeniero agrónomo Fabio Montossi, director del Programa Nacional de Carne y Lana del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), recordó que hubo una acumulación de forraje producto del buen crecimiento que hubo en la primavera y verano, por las altas temperaturas y buena pluviosidad. Se generó una acumulación importante de forraje, pero el problema es que hay material de buena calidad y de mala calidad.

Los de mala calidad están asociados a todos los restos secos de hojas y tallos que se mueren, pero que están mezclados con el material verde. Ese material es de bajo valor nutricional, indicó.

Señaló que las categorías jóvenes (terneros, terneras, novillos y vaquillonas) tienen altos requerimientos de energía, y particularmente de proteína, y por lo tanto esas pasturas no son las ideales para cumplir con los requerimientos de esas categorías.

Sostuvo que es muy importante manejar la suplementación energética y proteica, acompañada de un buen balance de minerales y vitaminas y lograr los objetivos productivos de esas categorías con altos requerimientos.

Explicó que la situación cambia cuando se trata de vacas de cría, cuando los requerimientos son totalmente distintos, particularmente de aquellas vacas que van a parir a fines del invierno y principio de primavera. “El gran desafío, con este tipo de pastura y en esta situación, es cómo armar una dieta adecuada para terneros y terneras post destete y categorías de recría como vaquillonas o novillitos de 250 a 300 kilos”, dijo.

Consultado sobre las mejores opciones de suplementación, respondió que hay distintas posibilidades, que van desde subproductos de la agricultura como el afrechillo, los bloques energéticos, proteicos y minerales, y raciones balanceadas.

“Se necesita conocer sobre el valor nutricional que tiene cada pastura para armar la dieta complementada por el suplemento. Sobre todo tener bien definido cuál ganancia quiero en cada una de las categorías. No es lo mismo el productor que quiera tener un ternero que gane 100 o 200 gramos por día o un productor que apuesta a ganar 700 u 800 gramos para en el invierno poder terminar con un novillo a los 24 meses. Ahí cambia la estrategia del manejo sobre campo natural. Hay que armar la dieta en base al objetivo de producción”, remarcó.

Ovinos de recría

En cuanto a la producción ovina, Montossi dijo que el gran desafío en este momento son las categorías de recría. Los corderos y corderas que están pasando el invierno y que normalmente son las categorías que van a los potreros más complicados del establecimiento. “La ventaja es que el ovino tiene mucha mejor capacidad de selección para alimentarse de las mejores partes de las pasturas”, destacó.

De todos modos, señaló que lo más fundamental es una suplementación energética durante el invierno. “En el caso de ovejas preñadas, particularmente acompañada de la esquila preparto no hay que olvidarse de una buena suplementación, sobre todo aquellas ovejas que estén con gestaciones múltiples”, sostuvo.

Agregó que también es recomendable tener una ecografía para saber cuáles ovejas están preñadas y dentro de las preñadas cuáles están gestando mellizos.

Cultivos de primor

El productor y dirigente de la Confederación Granjera, Remo Di Leonardi, dijo que en el sector los problemas generados por los fríos intensos y heladas llegan cuando ocurren fuera de época.

Consultado sobre la evolución de la cosecha de manzanas, dijo que van quedando sin cosechar algunas variedades tardías, como Crispin, que “está perfectamente adaptada al frío y la fruta resiste a las heladas en la planta, sin problemas”.

Señaló que las verduras de hoja no tienen inconvenientes porque las que se plantan a campo están adaptadas al clima, “lo único que puede pasar es un poco de retraso en su crecimiento”.

Reconoció que un fenómeno fuera de lo normal sí puede afectar a los cultivos de primor que están en el norte, sobre todo en Salto y Bella Unión. De todos modos reconoció que allí se aplica mucha tecnología, los cultivos están todos bajo invernáculos y tienen coberturas de riego aéreo sobre techo lo que minimiza el impacto de las heladas.

“No vemos inconvenientes. Sí vemos a nivel de mercado mucha oferta de acuerdo a la demanda. Tenemos una plaza saturada de producción y con muy lenta colocación en todos los rubros, algo llamativo para esta época del año. Ahora no se sale a hablar sobre el mercado de frutas y verduras como sí se habló en el verano. Cuando bajaron los precios nadie se acuerda del tema”, dijo.

Di Leonardi también recordó que hace unos años hubo importantes daños por heladas en los cítricos, pero dijo que fue un fenómeno fuera de lo normal. “Esperamos que no se repitan”, concluyó.

Cosecha y siembra de secano

El presidente de la Mesa Tecnológica de Oleaginosos, Roberto Verdera, consideró que las heladas son positivas para terminar de cosechar lo que queda de soja, maíz y sorgo y sembrar los cultivos de invierno porque ayudan a “generar piso en las chacras”, que desde hace varios días están con exceso de humedad impidiendo el ingreso de maquinaria.

Señaló que en la zona de Soriano y Río Negro queda alrededor del 15% de la soja por cosechar, y todo el maíz y sorgo de segunda. En tanto en la zona de Colonia la cosecha está entre 55% y 60% del total del área.

Explicó que el ciclo de los cultivos se acortó con el exceso de agua del verano y algún frío que se adelantó, lo que permitió que en el mes de abril se avanzara mucho en la cosecha. “Se levantó un área importante en un momento en que generalmente recién se está empezando a cosechar, porque este año los cultivos se aprontaron antes. Tuvimos muy buenos días de cosecha pero después empezó a llover. Quedó pendiente levantar un área que todavía no estaba pronta, la soja de segunda sembrada en la seca de diciembre, que nació despareja, con partes que están verdes y otras que están maduras”, comentó.

Sobre los rendimientos, dijo que son dispares, menores a los estimados, con diferencias por los tipos de suelos. Indicó que con “los excesos de lluvias los suelos se saturaron mucho de agua, sobre todo los mejores, que son más planos, profundos, pero pesados. Esos están rindiendo menos que los suelos no tan buenos, pero más quebrados, donde el agua se escurrió. Se invirtió el rendimiento respecto a otros años por la topografía del campo”.

Los promedios de la soja de primera rondan los 2.600 kilos por hectárea, sensiblemente por debajo del promedio del año pasado cuando se superaron los 3.000 kilos por hectárea. La situación es aún peor con las sojas de segunda donde los promedios actuales rondan los 1.800 kilos por hectárea, pero se espera una baja a 1.500 kilos por hectárea.

Cabe recordar que el costo de producción de una hectárea de soja se estima entre 1.000 y 1.200 kilos de la oleaginosa por hectárea, y el costo es aún mayor cuando la actividad se realiza en campos arrendados. La ventaja de la soja de segunda es que se realizó después de cultivos de trigo y cebada, que el año pasado tuvieron muy buenos niveles productivos.

Las lecheras consumen más

Rodolfo Braga, productor lechero y secretario de la Asociación Nacional de Productores de Leche, comentó que las heladas frenarán el crecimiento de las pasturas, que se seguirán desarrollando pero a un ritmo mucho más lento. De todos modos fue optimista, ya que los días de heladas generalmente tienen temperaturas en aumento hacia el mediodía y la tarde, lo que permite secar el piso para el pastoreo. También hay muchas praderas por sembrar, tarea que aún no se pudo hacer por el barro.

Además señaló que los establecimientos tienen mucha reserva de comida y que el consumo de las vacas aumenta con el frío.

La actual remisión de leche está a niveles muy similares a los logrados del año pasado, que fue récord. Se prevé que la producción aumente en invierno, porque en general el rubro tiene doble parición estacional, hay muchas vacas paridas y eso hace que aumente la productividad.

La propuesta Invierno Carga Cero

Vale la pena repasar la propuesta de novillo Invierno Carga Cero (Icace), desarrollada en Facultad de Agronomía por el profesor ingeniero agrónomo Alvaro Simeone, difundida ampliamente en las jornadas anuales de la Unidad de Producción Intensiva de Carne (UPIC), en Paysandú. A través de este sistema el invernador compra el ternero con 150 kilos y lo encierra, después ese ternero entra a la primavera con 250 kilos.

La ventaja que tiene el sistema Icace es que ese animal puede pastorear a campo natural en las demás estaciones del año. En la primavera gana 650 o 700 gramos por día y aún en condiciones de verano que puede ganar 300 gramos, dependiendo del tipo de campo, y 400 gramos en otoño. A la entrada del siguiente invierno ese ternero pesará 350 kilos, para ingresar a un segundo encierro. En setiembre el animal terminará con 500 kilos, con dos años de edad, pastoreando siempre a campo natural y con dos encierros en sus dos inviernos de vida.

Hay dos opciones de suplementación: armar una dieta mezclada, con ensilaje de planta entera, que es más barata; o comprar una ración formulada, con fibra incluida, que es más eficiente y tiene una operativa más fácil.

El cálculo que hay que hacer es el costo del ternero de 150 kilos a US$ 2,10 por kilo (US$ 315), más el costo de la ración en el primer encierro (600 kilos de ración que valga US$ 300/tonelada, o sea US$ 180) más la ración del segundo encierro (1.440 kilos a US$ 250/tonelada, son US$ 360), más la sanidad (US$ 10). La sumatoria da como resultado un costo de US$ 865. “Es una propuesta robusta que soporta las relaciones de precios actuales”, dijo Simeone a El Observador Agropecuario.