La Asociación Rural del Uruguay y la Federación Rural ya están trabajando juntas en el desarrollo de una estrategia que posibilite resolver los problemas que se están registrando en la comercialización de haciendas y la baja faena. 

Los productores ganaderos están preocupados por lo que consideran es una estrategia de algunas plantas frigoríficas basada en regular la faena que directamente repercute en una baja de los precios.

La meta de las dos gremiales es promover un ámbito de diálogo en el sector y mirar más a largo plazo, para evitar que las exportaciones de carnes uruguayas se vean afectadas; se busca aprovechar al máximo el abanico de mercados que tiene Uruguay y la actual demanda de carne bovina que se está dando en el mundo.

Productores y consignatarios de ganado sostienen que la dificultad para colocar vacas gordas en el mercado persiste, porque las entradas en los frigoríficos siguen largas. Por otro lado, la faena no muestra mayores signos de crecimiento y los productores tienen que alivianar los campos antes de que aprieten más los fríos.

Las gremiales aseguran que las señales que está dando el mercado de haciendas no son buenas para los criadores, un segmento formado por pequeños productores que no tienen a quienes transferirle la baja de la hacienda; los valores de las categorías de reposición siguen cayendo.

Desde hace meses se cuestiona si los 3 millones de terneros nacidos fue una oportunidad para disminuir la capacidad ociosa de la industria o representa una amenaza.